En Alcaíno utilizamos tecnología LED en nuestros letreros por su eficiencia energética, durabilidad y bajo mantenimiento.

A diferencia de sistemas tradicionales, emiten un solo color según su composición, lo que permite una iluminación más precisa y moderna. Gracias a esta tecnología, entregamos soluciones confiables, sostenibles y visualmente impactantes, adaptadas a entornos urbanos y carreteras.

Iluminación LED: eficiencia y alto rendimiento

Cerrajería

Nuestra área de soldadura es una parte clave en el proceso de fabricación. Gracias a ella, aseguramos estructuras firmes, seguras y con acabados de alta calidad, fundamentales para que cada letrero cumpla con los estándares que nos distinguen.

Trabajador en un taller de pintura, rociando pintura en piezas metálicas. Usa máscara protectora, guantes y ropa de trabajo naranja y negro.

Pintura de alta calidad

Contamos con una cámara de pintura propia, lo que nos permite aplicar acabados duraderos y uniformes tanto en estructuras metálicas como en letreros.

Esto garantiza un control total sobre la calidad, protección contra la corrosión y una excelente presentación final en cada proyecto.

Diseño e Ingeniería: el corazón de cada proyecto

En Alcaíno, el área de diseño e ingeniería es el punto de partida de todo.
Sin diseño, no hay letrero.

Cada proyecto es abordado como un traje a la medida, pensado específicamente para cada cliente, cada espacio y cada necesidad.

Desde la idea inicial hasta los planos constructivos, nuestro equipo transforma conceptos en soluciones concretas, funcionales y visualmente impactantes.

Un hombre en un ambiente de laboratorio con maquinaria especializada, trabajando con precisión en un equipo técnico

Sistema robotizado de fabricación de letras

En Alcaíno contamos con un sistema robotizado de flejado para la fabricación de letras volumétricas.

Gracias a esta máquina especializada, logramos mayor precisión, velocidad y consistencia en nuestros procesos, optimizando los tiempos de producción sin sacrificar calidad.

Este nivel de automatización nos permite entregar letreros con acabados perfectos y ajustes exactos, adaptados a cada proyecto.

Una persona trabaja en la reparación de un casco de motocicleta con un taladro en un taller.

Armado final: precisión y calidad

Aunque el armado es una de las últimas etapas en la fabricación de un letrero, en Alcaíno le damos la misma importancia que al diseño o la ingeniería.

Contamos con un equipo especializado que ejecuta esta fase con precisión y cuidado, asegurando que cada letrero cumpla con nuestros altos estándares de calidad y las expectativas de nuestros clientes.

Persona operando una máquina de corte CNC en una fábrica.

Corte CNC: precisión para cada componente

Otro de los procesos clave en nuestra planta es el uso de router CNC, una herramienta de alta precisión que nos permite fabricar piezas exactas y de excelente acabado.

Con esta máquina realizamos el corte de pantallas acrílicas para letras, planchas de Alucobond para cajas de luz, y una gran variedad de piezas que luego son ensambladas en letreros, tótems y estructuras especiales.

Esta tecnología nos permite trabajar con gran eficiencia, optimizar materiales y asegurar la calidad en cada etapa del proceso.

Dos trabajadores con cascos de seguridad observando una escultura de un libro abierto en la fachada de un edificio de gran altura.

Instalación: donde todo cobra vida

Nada de lo que fabricamos sería real si no se instala en el lugar para el que fue diseñado.

En Alcaíno, contamos con un equipo profesional de instaladores que se encarga de que cada proyecto cobre vida exactamente como fue imaginado.

Ver el letrero instalado, encendido y funcionando tal como se diseñó, es el momento que más disfrutan nuestros clientes —y también nosotros.

Plataforma tecnológica interior de un laboratorio con estructura metálica y un equipo grande con componentes en amarillo y gris, dos personas inspeccionando, en un espacio amplio y bien iluminado con techo de vigas metálicas.

Termoformado: innovación hecha en casa

Uno de nuestros mayores desafíos fue lograr la fabricación de logotipos termoformados. Esta meta se volvió realidad cuando, tras años de desarrollo, diseñamos y construimos nuestra propia máquina termoformadora.

Dominar esta técnica y el comportamiento del material nos tomó tiempo, esfuerzo y muchas pruebas.

Hoy, con orgullo, podemos decir que contamos con la termoformadora más grande de Chile, lo que nos permite crear piezas únicas, de gran escala y con un nivel de detalle sobresaliente.

Vista nocturna de un concesionario Volkswagen, con varios autos estacionados y luces en el edificio, bajo un cielo estrellado y la luna llena.